Reseña: Amantes del escándalo

Amantes del escándalo

Autora: Robin Schone
Editorial: Manderley
ISBN: 9788483650721 
Género: Erótico/Histórico
Serie: 1º- El Club de hombres y mujeres

Sinopsis:

Casada a los quince años y viuda a los cuarenta y nueve, Frances Hart sólo ha conocido lo que significan los deberes de una esposa y madre, nunca las alegrías de una mujer. Decidida a tener una vida nueva, se embarca en un solitario viaje a Londres.

El abogado James Whitcox, también viudo, ha hecho de su vida una constante responsabilidad, pero nunca ha experimentado lo que es la verdadera pasión. James, se ha asociado al selecto club "Los Hombres y las Mujeres" donde se discute sobre las relaciones sexuales, pero hablar de placer no es lo mismo que experimentarlo... hasta que Frances aparece en una reunión ilustrando a los presentes acerca de las necesidades de una mujer — y tentando a James para llevar a cabo todas sus teorías eróticas.

Quien haya leído alguna vez a Robin Schone sabe que esta autora tiene una forma bastante especial de enfocar sus historias. Amantes del escándalo es una novela erótica que se aleja bastante de lo que solemos ver en este tipo de novelas.

Frances ha tenido una vivida como tantas otras mujeres de su tiempo: se casó siendo aun una niña con un hombre que la sacaba casi treinta años y desde ese momento y hasta el fallecimiento de su esposo se ha dedicado por entero a su familia. Se ha pasado veinticuatro años siendo madre y esposa, sin lugar para la mujer, los deseos o los caprichos. Poco tiempo después de quedarse viuda, decide viajar a Londres para conocer la ciudad y alejarse un poco su casa. En Londres transforma su apariencia, deja de vestir de forma aburrida y práctica, y se hace con un modesto aunque colorido fondo de armario, además, se tiñe el pelo de un vivo color rojizo y comienza a visitar museos, adquiriendo una cultura que hasta ese momento había permanecido vedada para ella. Por equivocación entra en una sala en la que se encuentran reunidos un grupo de mujeres y hombres, uno de los cuales tendrá al atrevimiento de preguntarla qué es lo que desea una mujer. A partir de ese primer encuentro, Frances formará parte, gracias a James (el hombre que la hizo tal pregunta), del Club de Hombre y Mujeres, que debate sobre los aspectos morales, filosóficos y sociales que definen las relaciones entre hombres y mujeres.

James es un hombre atormentado. Su esposa ha muerto también no hace demasiado y se da cuenta de que para él ha sido una completa desconocida, no sabía más que era la madre de sus hijos y que no le quería en su cama. Se siente perdido, enfadado y desesperanzado por haber pasado toda una vida sin saber lo que es el auténtico deseo. Cuando vuelve la vista atrás se da cuenta de que siempre ha pagado por sexo: a su mujer le regalaba joyas cada vez que la daba un hijo, único motivo por el que mantenían relaciones, y a sus amantes les pagaba directamente por ello. Anhela ser deseado de verdad por una mujer, y, lo que es peor, duda de que ese deseo sea real. Por su parte, Frances nunca se ha planteado tales cuestiones, al menos no hasta quedarse viuda. El sexo no era para ella, era el momento para que su marido disfrutara y la vía para concebir hijos. Pero tiene inquietudes y su nueva faceta como mujer tendrá mucho que ver con el sexo.

Resulta curioso comprobar cómo dos personas tan distintas (James es un abogado famoso y rico que procede de una buena familia, mientras que Frances es una mujer de campo, humilde y poco instruida) tienen las mismas inquietudes y los mismos deseos.

Los protagonistas llaman la atención, no solo porque se alejan mucho de la edad media de los protagonistas de novela erótica, sino porque dedican mucho tiempo a las reflexiones y sus pensamientos siguen hilos más o menos complejos.

La novela tiene un aire muy sensual ya que ambos personajes, sobre todo James, lo son. No son las típicas escenas de sexo sino que transcurren de una forma más pausada y con un estilo propio. Lo que importa no es el acto en sí sino la forma en la que se hace y los sentimientos que provoca.

El ritmo es quizás demasiado lento y aunque bien ambientada, sobran las descripciones en algunas escenas.

Con un estilo propio y personal, Robin Schone nos presenta una historia erótica muy sensorial, diferente a lo que se lee en el género.