Reseña: El cordero que conquistó París, Catherine Siguret

Catherine Siguret · Narrativa · Suma de letras

El cordero que conquistó París ha sido una lectura diferente a lo que me esperaba. Mis expectativas me encaminaban hacia un comedia ligera repleta de momentos hilarantes, pero me he encontrado con una comedia profunda en la que el famoso cordero, Tú, que Alice adopta no es más que la punta del iceberg,  una razón que le sirve para hablar todo lo que le preocupa y hacernos un fiel retrato de sí misma. Entre las páginas de la novela vais a encontrar notas de humor, pero sobre todo las reflexiones de una mujer independiente y segura de sí misma, con una filosofía de la vida que, al cumplirla, la convierte en alguien realmente peculiar.

Desde los ochos años Alice adora a los corderos y ahora, a sus cuarenta y cuatro años, ha decidido que es el momento de adoptar uno. Poco importa que nadie la entienda, que la tomen por loca y que sus vecinos no hagan más que poner quejas, ella está decidida. Y así llega Tú a su vida, desatando un tsunami que quejas, protestas y chismes, cambiando la vida de Alice de una forma deliciosa.

Si nos pasáramos la vida copiando los errores de los demás, perderíamos la esperanza.

Iba con unas claras ideas preconcebidas sobre lo que podía ofrecerme esta lectura y me ha sorprendido para bien. Me esperaba algo más ligero, el tipo de novela con el que matas el rato y cuya lectura no te exige demasiado, pero me he encontrado con una historia en la que tienes que poner tus cinco sentidos, narrada con un estilo elaborado y cuidado. El cordero que conquistó París cuenta con escasos diálogos pues en realidad es el alegato que su protagonista pretende presentar a la justicia como consecuencia de los problemas que sus vecinos le causan con motivo del cordero. Esto condiciona mucho la lectura, pues la voz de Alice, que llena todos los espacios, se convierte en la única para el lector, en el filtro a través del cual analizamos todo lo demás.

Alice es una protagonista fuerte y valiente. Es una mujer madura que se conoce muy bien a sí misma, mordaz, con respuesta para todo e inteligente. No le gusta mirar atrás, no se regodea en su dolor, no piensa demasiado en sus malos momentos y decisiones, vive esas situaciones solo una vez, aprende de ellas valiosas lecciones y sigue adelante. Tiene un vitalismo natural y sabio que no resulta artificial o forzado en ningún momento, sino parte de su filosofía natural, una con la que es coherente y que lleva a la práctica. Es un personaje peculiar, una mujer hecha a sí misma que hace oídos sordos a las críticas del mundo y vive la vida como le apetece, da igual que eso signifique tener una aventura que no va a llevarla a ninguna parte, sentirse plena con un amor no expresado hacia un desconocido, tener doscientos amigos y celebrar con ellos todo tipo de fiestas o tener un cordero en una exclusiva residencia parisina. Alice es un personaje muy de novela, resulta un pelín excentréntica, no se trata de una de esos personajes que buscan intencionadamente caer bien al lector sino que se presenta tal y como es.

La novela abarca una interesante variedad de temas e ideas: la convivencia vecinal, problemática por la tendencia de los demás a meterse en la vida del de al lado, la soberana creencia de que todos debemos estar en el mismo rebaño, se iguales y pensar lo mismo, la sordera que rodea hoy en día a todo el mundo, demasiado ocupado con la vida, lo fácil que juzgamos a los demás, lo falsamente libres que nos creemos, cuando no hacemos más que encadenarnos a las cosas…

El cordero que conquistó París me ha convencido. Entre sus páginas encontramos una historia mordaz e irónica en la que se habla de temas de gran actualidad con sentido del humor y gran practicidad. Para mí no ha sido una comedia con la que reír, sino una historia interesante y más profunda de lo que esperaba, caracterizada por una prosa cuidada que exige al lector prestar atención. a cada frase.