Reseña: Leonora

02 mayo 2013

Leonora
Autora: Carmen Torres                Género: Narrativa
Editorial: DeBolsillo                      ISBN: 9788490323113

Le resultaba extraño llamarla abuela, cuando no parecía haber salido nunca de la adolescencia. En el estudio de su abuelo, estaba tumbada indolente sobre un lienzo blanco cubierta de flores menudas, sujeta por las manos de un hombre. En otro más grande, aparecía como en éxtasis tocando el piano en una alegoría de la música. Y, misteriosamente, Geneviève se encontraba dentro de ese cuadro. Leonora -lo decía su abuelo- no estaba en el estudio de Klimt, se evaporaba en el aire que ella creaba con la música, estaba en las notas que llenaban cada ángulo de la habitación, dormida en el sueño de sí misma, el sueño de su inspiración.

Leanora tiene dos protagonistas, la misma Leanora y la música, pero narra bastantes más historias, entre las que se pasean personajes como Freud y Klimt. Narrada desde diferentes puntos de vista, abarca una línea temporal de casi un siglo y en sus doscientas páginas habla de muchas cosas, pero, sobre todo de música y vida.

Leonora es una joven con un excepcional talento para la música, domina el piano y la composición, y no anhela para ella más que su música. Nacida en una familia acomodada y pese a tener una madre excesivamente protectora, tendrá la oportunidad de con solo catorce años trasladarse a Viene e ingresar en el conservatorio, donde es la única estudiante femenina. Es brillante, pero no logra sentirse plena, no es para nada una mujer convencional y su talento es toda su vida, no quiere que nada lo eclipse ni corte sus alas. En su vida comenzarán a aparecer los hombres, un buen padrino, un mejor amigo, un pintor obsesionado con su belleza… y Leonora dejará de ser una niña para experimentar multitud de sentimientos, pero sin sentirse realmente bien, sin encontrar esa paz de espíritu que tanto necesita.
Mi cuarto soy yo y cuando anochece mis ojos se llenan de mis cosas y, por unos minutos, me siento profundamente dichosa en la soledad de mí misma. Ese trozo de paz que puede ser mío sin pedir nada a nadie.
Por las páginas de esta nova circulan multitud de personajes, pero entre todos ellos destaca Leonora, que es comienzo y final de este libro, estando presente, de una u otra forma, en la vida de cada uno de los personajes que forman parte de la historia. Es una protagonista muy bien perfilada, una mujer adelantada a su tiempo, que huye de los convencionalismos, busca conocerse a sí misma y, sobre todo, convertirse en una leyenda gracias a su música. No comparto algunas de sus ideas, pero le reconozco su valentía, su deseo de vivir de acuerdo a sus necesidades y no a las normas de la sociedad. El resto de personajes están menos perfilados aunque sí se dan las pinceladas básicas para que los conozcamos.

Me ha encantado conocer la historia de El beso, de Gustav Klimt, de quien Leonora es protagonista. Pintura, pero sobre todo música, tiene un lugar destacado en la novela, sobre todo esta última, que según avanzan las páginas va cobrando más y más protagonismo. La autora se ha esperado en este apartado, se nota que ha realizado una buena labor de documentación.
¿Por qué siempre la mujer en función del hombre?
A pesar de que Hans, el mejor amigo de la infancia de Leonora, es nuestra ancla para conocer toda la historia y situarnos el tiempo, no conocemos de su propia boca toda la historia, sino que escuchamos otras voces. Voces que la autora ha sabido caracterizar a la perfección, dándoles a cada uno una propia personalidad, en el caso de Eleonora un tono sentimental, introspectivo y melancólico.

La novela abarca la Primera y la Segunda Guerra Mundial, que no se viven de cerca, pero cuyas consecuencias sí son palpables. Se habla también de la incorporación de las mujeres a la universidad, del movimiento feminista y de las caducas y machistas tradiciones de la sociedad.
Creemos que el pasado es lo único que tenemos, pero ese tiempo fue sólo el principio para empezar a vivir.
El mayor hándicap de la historia está en su extensión. En poco más de doscientas páginas es muy complicado desarrollar una historia, lograr la profundidad que una novela de estas características necesita. En varios momentos he tenido la sensación de que todo pasaba demasiado rápido, se encadenaban sucesos sin tregua, que se mencionaban pero no se desarrollaban. En las primeras noventa páginas el tono es intimista y reflexivo, es Eleonora la que nos habla y en su historia los sentimientos son más importantes que los acontecimientos. Pero a partir de ahí predominan las historias de otros personajes, muy interesantes y con mucho potencial, que no se desarrollan, poco más que se mencionan y no llegas a conectar con los personajes y te quedas con la sensación de que nos has conocido sus historias, simplemente has leído un breve resumen de los momentos que han marcado sus vidas.

8 comentarios :

  1. No conocía esta novela y parece preciosa, me encanta la portada, creo que podría gustarme. Muchas gracias por la reseña.

    Besos.

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  2. Yo tampoco conocía el libro, aunque el nombre de la autora sí me suena. Creo, de todos modos, que empezaría con otra novela de Torres Ripa. Ya tengo echado el ojo a una que me llama más que esta que nos descubres hoy.

    Un besito y feliz jueves.

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  3. Otra que no conocía el libro... me lo llevo apuntado =)

    Besotes

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  4. No la conocía, la portada me parece preciosa, pero me parece que no ha acabado de llenarte. Creo que la dejare pasar.

    Gracias por la reseña, besos :)

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  5. No conocía la obra pero es que no me llama naaada pero la portada en presiosa, por eso me la llevaría a la estantería.

    Un besazo!

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  6. Yo lo dejé por la mitad más o menos.
    No me estaba aportando nada y desde luego no me estaba enganchando.
    Seguramente lo terminaré pero por cabezonería.

    Un beso

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    1. Yo creo que la primera mitad de la historia es mucho mejor, pero después, con tanto dato te pierdes y la esencia de la historia se diluye. Una pena que la autora no haya dado más espacio a los personajes.

      Un beso

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  7. Pues me ha encantado, además habla de El beso uno de mis cuadros favoritos.
    Me apunto el título, gracias por descubrírmelo ya que no lo conocía
    Besos

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