Reseña: Sólo amor

Sólo amor

Autora: Elizabeth Lowell
Editorial: Nefer
ISBN: 978-84-92415-15-1
Género: Histórico
Serie: 4º- Only

Sinopsis:

Territorio de Colorado, 1868 

Tras la desaparición de su familia, la bella e inocente Shannon Conner trata desesperadamente de sobrevivir al gélido invierno en la pequeña cabaña que ha heredado.

Sola y desamparada, deberá enfrentarse al cruel asedio al que la someten un grupo de forajidos... Y a la devastadora atracción que siente por el duro pistolero que arriesgará su propia vida para protegerla.

Rafe Moran, un hombre peligroso e implacable, jamás ha pensado en asentarse en ningún lugar, hasta que conoce a Shannon y sucumbe a la dulce violencia del deseo y la pasión que ella le ofrece...

Una pasión salvaje y sin límites por la que será capaz de perder hasta su misma alma.

Sólo amor era justamente la novela que me apetecía leer en el momento en el que me puse con ella: una historia sencilla y bonita, pero con su punto de profundidad.

Shannon Conner sobrevive como puede, protegiéndose de los hombres que pretenden aprovecharse de la ausencia de su esposo, comiendo lo poco que puede reunir, sacando recursos de donde no los hay, pasando frío… En una de sus visitas a la tienda del pueblo, unos hombres intentarán sobrepasarse con ella y Rafe Moran intervendrá a su favor, poniendo a esos hombres en su sitio con su látigo (de ahí su apodo: Látigo Moran). A partir de ese momento, Rafe se sentirá inclinado a protegerla y a ayudarla en su precaria situación.

En una época en la que las mujeres no sirven nada más que para tener hijos y llevar la casa de un hombre, y donde son vistas como seres completamente dependientes y débiles, Shannon lucha por ser independiente y por vivir en libertad, a pesar de que eso conlleve vivir pasando necesidades. Rafe no lo entiende y siente la, por momentos, absurda necesidad de protegerla de todo. Rafe peca de sobreprotector, no entiende la necesidad de ella de valerse por sí misma, de aprender a cazar y no esperar que sea un hombre quien le traiga el sustento, de defenderse de los hombres que se quieran aprovechar de su soledad y no esperar a que él y su látigo aparezcan. Esta falta de comprensión me ha sacado un poco de quicio. Entiendo que él quiera protegerla, sobre todo teniendo en cuenta que está completamente sola y no cuenta con nadie, pero a veces sus deseos de protección herían a Shannon.

Me ha gustado especialmente que Shannon haya evolucionado a lo largo de la historia. Al principio comienza siendo una mujer con la que no acabo de conectar (me parece que habla mucho pero actúa poco), pero poco a poco la vamos conociendo más y se nos muestra como es: una mujer fuerte, valerosa, tenaz y tierna, que no está de acuerdo con lo que la sociedad establece para la mujer de su tiempo y que valora su libertad por encima de todo, reivindicando su derecho a vivir su vida sola y como quiera, sin la necesidad de un hombre. Pero bajo esta dureza, también se esconde una mujer que desea ser amada y tener su casa, su hombre y sus hijos; pero estos son sueños imposibles para ella, así que se cuida mucho de no dejarlos ver. Me ha gustado de ella la capacidad que tiene para enfrentar la realidad, para quedarse con lo mejor de cada momento y no agobiar a los demás con su sufrimiento.

Rafe es un alma inquieta, va siempre en busca de un nuevo amanecer y no regresa dos veces al mismo sitio, salvo para visitar a su familia. Ha dado la vuelta al mundo tres veces, habla varias lenguas, conoce diversidad de culturas, y sigue manteniendo esa ansia por viajar. Sabe que él nunca podrá formar su propia familia, su destino es viajar por todo el mundo y no asentarse. Éste será el principal obstáculo en su relación con Shannon, ambos quieren cosas distintas y eso solo les puede provocar dolor.

La novela tiene un ritmo ágil, los acontecimientos, a pesar de previsibles, están bien narrados, y a medida que pasan las páginas la autora sabe dotar de emotividad a los hechos. Me ha llamado la atención la carga sensual de la novela, que se estira y no culmina hasta que pasan muchas páginas.

Los protagonistas tienen fuerza y saben llenar bien la historia, viéndose apoyados por unos buenos secundarios, representados por la familia de Rafe (y cuyas historias son los tres libros anteriores de esta serie, pero pueden leerse de forma independiente).

El final ha sido decepcionante, no solo porque le faltan varios capítulos (la trama queda sin cerrar del todo, no resolviéndose una de las claves principales de la historia y dándose por sentada una parte fundamental de la misma) sino también porque el epílogo me ha dejado fría, típico y poco conciso.

Sólo amor es una historia sencilla pero con fuerza. Nos habla de una época difícil y nos planeta la situación de una joven mujer que quiere hacer con su vida lo que quiera, ser independiente y libre.