Caricias de hielo
Autora: Nalini Singh
Editorial: Random House Mondadori
ISBN: 9788401383830
Género: Paranormal
Serie: 3º- Psi/Cambiantes
Editorial: Random House Mondadori
ISBN: 9788401383830
Género: Paranormal
Serie: 3º- Psi/Cambiantes
Sinopsis:
Cuando era soldado de élite de las fuerzas del Consejo de los Psi, Judd Lauren se vio obligado a hacer cosas terribles en nombre de su gente. Ahora es un desertor y sus tenebrosas habilidades le han convertido en el más letal de los criminales: frío, despiadado, insensible. Antes de ser abducida, brutalmente torturada y mentalmente violada por un poderoso asesino en serie Psi, Brenna Kincaid era una cambiante intrépida y voluntariosa. Ahora ha vuelto con los suyos e intenta reponerse de la pesadilla. Pero en cuanto se descubre un primer cadáver víctima de una violencia que le resulta demasiado familiar, Brenna teme que la sensibilidad diabólica que merodea en su interior, consecuencia de la cautividad y las torturas, la haya convertido en aquello que más teme. Consciente de que Judd Lauren es el único que puede entenderla y ayudarla, recurre a él, aunque su faceta sensual se rebela contra la personalidad fría e inhumana del guerrero. Y el deseo estallará entre ellos, y su pasión mutua supondrá un peligro que amenazará no solo a sus corazones, sino también sus vidas.
Nalini ha encontrado la chispa que eché de menos en
el anterior libro, La noche del jaguar,
ha conseguido mantenerme en vilo, convencerme con sus personajes, sobre todo
con Judd, no tanto con Brenna, y capturar mi atención de principio a fin.
Brenna, después de haber sido brutalmente violada
por Santano Enrique (un Psi-c), trata de recuperarse como puede, pero las
heridas que la infligió son difíciles de curar, tanto, que han llegado a
afectar a su naturaleza como loba y a su personalidad; aquella chica
extrovertida y comunicativa ha dado paso a una nueva Brenna atormentada e
insegura. Cuando a su mente comienzan a llegar imágenes en las que la muerte y
la oscuridad campan a sus anchas, Brenna decida acudir a Judd, el único que la
puede entender. Judd es un desertor, un Psi-c que abandonó a su raza porque
iban a acabar con toda su familia sometiéndola a rehabilitación. Desde
entonces, ha permanecido con el clan de los SnowDancer, viviendo con ellos pero ajeno a sus asuntos, él solo está allí
porque dan asilo a su familia.
Un asesinato tiene lugar dentro del clan y las
alarmas saltan entre los lobos y el propio Judd: alguien quiere acabar con
Brenna. Además, el Consejo Psi, que ya ha sido “derrotado” dos veces por los
cambiantes (Faith y Sascha), ha decidido tomarse su revancha: a través de
muertes y ataques, intenta enemistar a los lobos (SnowDancer) y a los leopardos
(DarkRiver) para que acaben los unos con los otros.
En este caso nos encontramos con una historia
distinta a las anteriores, no solo porque se intercambian los papeles (ya no es
una mujer Psi y un hombre cambiante, ahora es al revés) sino porque la historia
de Judd es mucho más difícil que la de los anteriores Psi (Sascha y Faith): en
él, el Silencio sigue profundamente arraigado y, es más, no quiere romperlo
porque hacerlo significaría poner en peligro a todo el mundo. Como Psi-c tienen
un poder telequinésico enorme, pero además, cuenta con una designación
(determinadas características) que le hace ser especial y letal. Muerte ha
sido su apellido y como Flecha, miembro del ejército Psi, ha sido instruido
para matar desde que era un niño. Ha visto y hecho más de lo que podríamos
imaginar; ha visto y le han enseñado como su poder es mortífero y necesita
controlarlo para no provocar una catástrofe. Debido a todo ello, la relación
entre Brenna y él será tan complicada: ella, como cambiante, necesita el
contacto piel con piel, palabras de consuelo, apoyo… y Judd no puede
ofrecérselo, le han educado para no tener emociones y ante el menor contacto de
Brenna, el dolor se extiende por el cuerpo del cambiante.
Me ha gustado mucho Judd, como personaje ha dado
mucho de sí en la historia. Estábamos acostumbrados, por los dos anteriores
libros, a conocer como un psi rompe con el Silencio y da rienda suelta a sus
emociones de una forma relativamente sencilla. El caso de Judd, esto es mucho más
enrevesado y lo he disfrutado más. Uno de los aspectos que más
he disfrutado del libro han sido aquellas partes en las que se describen las
sensaciones físicas y mentales que Judd experimenta a medida que el Silencio va
fallando. Las comparaciones que se hacen para que el lector lo entienda me han
parecido muy acertadas e ilustrativas. Nalini no se apresura en ese parte,
todo un acierto, y podemos ver como poco a poco el control del hombre de hielo se va
resquebrajando.
Nalini nos desentraña un poco más el complejo mundo
de los Psi: nos cuenta los orígenes del Silencio, los experimentos fallidos que
acabaron con la muerte de muchos, se mencionan algunos de los flecos sueltos que
el Consejo se ha encargado de ocultar a la población y nos presenta cuales son
los planes futuros del Consejo (nada halagüeños, ya os lo adelanto). Me sigue
impresionando la capacidad de esta mujer para crear historias como estas, y me
sigue pasando como en siempre: me tengo que releer algunos párrafos o pararme a
pensar para entender bien que es lo que me está contando.
Aparece un buen puñado de secundarios: contamos con
pequeñas intervenciones de Lucas y Sascha, que a las nostálgicas como yo les
encantarán, de ahí que haya echado de menos saber algo de Faith y Vaughn; conocemos un poco del pasado de Hawke,
el alfa de los SnowDancer, y del porqué de su profundo odio hacia los Psi (¡qué
ganas de tener su historia entre manos! aunque me temo que vamos a tener que
esperar bastante porque su historia es la número diez en la saga); los
sobreprotectores hermanos de Brenna, Andrew y Riley; la familia de Judd, los
Lauren… y la lista sigue y sigue.
A pesar de lo que me ha gustado, es verdad que la
historia tienen algunos puntos débiles: Nalini introduce muchas cosas a la
trama, relacionadas con el mundo de Psi, pero las deja demasiado en el aire, y
además, les da una importancia intermitente en el libro (aparecen en ciertos
momentos concretos y tienen que pasar muchas páginas hasta que se vuelva a
decir algo sobre ello); el personaje de Brenna no me ha llegado todo lo que me
esperaba, admiro su fuerza y su coraje pero la ha faltado algo; y por último, y
referido a la edición, ¿qué cara es esa? La de Judd no, de eso estoy segura.
¡Si hasta parece que está sonriendo! Y el hombre de hielo no sonríe nunca.
Hola!
ResponderEliminarAins, no me leo la reseña que ya he leío un par de spolilersxD
Estoy deseando probar esta saga^^
Besotes!
Esta saga solo me he leido el primero y me gustó, tengo pendiente los demás, pero es que tengo una lista enorme de pendiente y no tengo tiempoooo!! jajaja Gracias por la reseña guapa :)
ResponderEliminarHe leido los tres primeros y me han encantado, sin duda coincido contigo, el tercer libro es el que más me ha gustado de los tres. Judd me ha cautivado en todos los sentidos, además cada libro va a más, pasando en este útimo muchas más cosas que en los otros anteriores. Me encanta que aparezcan los protagonistas de los anteriores, así sabemos como les van, Lucas y sascha tambien me gustaron mucho.
ResponderEliminarMe recuerda en como avanzan las tramas y en que cada libro se centra en una pareja en otra saga que me enganchó hace tiempo y por el que voy en el libro 10 que es La hermandad de la Daga Negra (increiblemente maravillosos).
Asi que ahora a por el cuarto que trata de Clay (sin duda otro cambiante de lo más interesante)