Reseña: Caricias de hielo

24 abril 2012


Caricias de hielo
Autora: Nalini Singh
Editorial: Random House Mondadori
ISBN: 9788401383830
Género: Paranormal
Serie: 3º- Psi/Cambiantes
Sinopsis:

Cuando era soldado de élite de las fuerzas del Consejo de los Psi, Judd Lauren se vio obligado a hacer cosas terribles en nombre de su gente. Ahora es un desertor y sus tenebrosas habilidades le han convertido en el más letal de los criminales: frío, despiadado, insensible. Antes de ser abducida, brutalmente torturada y mentalmente violada por un poderoso asesino en serie Psi, Brenna Kincaid era una cambiante intrépida y voluntariosa. Ahora ha vuelto con los suyos e intenta reponerse de la pesadilla. Pero en cuanto se descubre un primer cadáver víctima de una violencia que le resulta demasiado familiar, Brenna teme que la sensibilidad diabólica que merodea en su interior, consecuencia de la cautividad y las torturas, la haya convertido en aquello que más teme. Consciente de que Judd Lauren es el único que puede entenderla y ayudarla, recurre a él, aunque su faceta sensual se rebela contra la personalidad fría e inhumana del guerrero. Y el deseo estallará entre ellos, y su pasión mutua supondrá un peligro que amenazará no solo a sus corazones, sino también sus vidas.

Nalini ha encontrado la chispa que eché de menos en el anterior libro, La noche del jaguar, ha conseguido mantenerme en vilo, convencerme con sus personajes, sobre todo con Judd, no tanto con Brenna, y capturar mi atención de principio a fin.

Brenna, después de haber sido brutalmente violada por Santano Enrique (un Psi-c), trata de recuperarse como puede, pero las heridas que la infligió son difíciles de curar, tanto, que han llegado a afectar a su naturaleza como loba y a su personalidad; aquella chica extrovertida y comunicativa ha dado paso a una nueva Brenna atormentada e insegura. Cuando a su mente comienzan a llegar imágenes en las que la muerte y la oscuridad campan a sus anchas, Brenna decida acudir a Judd, el único que la puede entender. Judd es un desertor, un Psi-c que abandonó a su raza porque iban a acabar con toda su familia sometiéndola a rehabilitación. Desde entonces, ha permanecido con el clan de los SnowDancer, viviendo con ellos pero ajeno a sus asuntos, él solo está allí porque dan asilo a su familia.

Un asesinato tiene lugar dentro del clan y las alarmas saltan entre los lobos y el propio Judd: alguien quiere acabar con Brenna. Además, el Consejo Psi, que ya ha sido “derrotado” dos veces por los cambiantes (Faith y Sascha), ha decidido tomarse su revancha: a través de muertes y ataques, intenta enemistar a los lobos (SnowDancer) y a los leopardos (DarkRiver) para que acaben los unos con los otros.

En este caso nos encontramos con una historia distinta a las anteriores, no solo porque se intercambian los papeles (ya no es una mujer Psi y un hombre cambiante, ahora es al revés) sino porque la historia de Judd es mucho más difícil que la de los anteriores Psi (Sascha y Faith): en él, el Silencio sigue profundamente arraigado y, es más, no quiere romperlo porque hacerlo significaría poner en peligro a todo el mundo. Como Psi-c tienen un poder telequinésico enorme, pero además, cuenta con una designación (determinadas características) que le hace ser especial y letal. Muerte ha sido su apellido y como Flecha, miembro del ejército Psi, ha sido instruido para matar desde que era un niño. Ha visto y hecho más de lo que podríamos imaginar; ha visto y le han enseñado como su poder es mortífero y necesita controlarlo para no provocar una catástrofe. Debido a todo ello, la relación entre Brenna y él será tan complicada: ella, como cambiante, necesita el contacto piel con piel, palabras de consuelo, apoyo… y Judd no puede ofrecérselo, le han educado para no tener emociones y ante el menor contacto de Brenna, el dolor se extiende por el cuerpo del cambiante.

Me ha gustado mucho Judd, como personaje ha dado mucho de sí en la historia. Estábamos acostumbrados, por los dos anteriores libros, a conocer como un psi rompe con el Silencio y da rienda suelta a sus emociones de una forma relativamente sencilla. El caso de Judd, esto es mucho más enrevesado y lo he disfrutado más. Uno de los aspectos que más he disfrutado del libro han sido aquellas partes en las que se describen las sensaciones físicas y mentales que Judd experimenta a medida que el Silencio va fallando. Las comparaciones que se hacen para que el lector lo entienda me han parecido muy acertadas e ilustrativas. Nalini no se apresura en ese parte, todo un acierto, y podemos ver como poco  a poco el control del hombre de hielo se va resquebrajando.

Nalini nos desentraña un poco más el complejo mundo de los Psi: nos cuenta los orígenes del Silencio, los experimentos fallidos que acabaron con la muerte de muchos, se mencionan algunos de los flecos sueltos que el Consejo se ha encargado de ocultar a la población y nos presenta cuales son los planes futuros del Consejo (nada halagüeños, ya os lo adelanto). Me sigue impresionando la capacidad de esta mujer para crear historias como estas, y me sigue pasando como en siempre: me tengo que releer algunos párrafos o pararme a pensar para entender bien que es lo que me está contando.

Aparece un buen puñado de secundarios: contamos con pequeñas intervenciones de Lucas y Sascha, que a las nostálgicas como yo les encantarán, de ahí que haya echado de menos saber algo de Faith y Vaughn; conocemos un poco del pasado de Hawke, el alfa de los SnowDancer, y del porqué de su profundo odio hacia los Psi (¡qué ganas de tener su historia entre manos! aunque me temo que vamos a tener que esperar bastante porque su historia es la número diez en la saga); los sobreprotectores hermanos de Brenna, Andrew y Riley; la familia de Judd, los Lauren… y la lista sigue y sigue.

A pesar de lo que me ha gustado, es verdad que la historia tienen algunos puntos débiles: Nalini introduce muchas cosas a la trama, relacionadas con el mundo de Psi, pero las deja demasiado en el aire, y además, les da una importancia intermitente en el libro (aparecen en ciertos momentos concretos y tienen que pasar muchas páginas hasta que se vuelva a decir algo sobre ello); el personaje de Brenna no me ha llegado todo lo que me esperaba, admiro su fuerza y su coraje pero la ha faltado algo; y por último, y referido a la edición, ¿qué cara es esa? La de Judd no, de eso estoy segura. ¡Si hasta parece que está sonriendo! Y el hombre de hielo no sonríe  nunca.


La novela cuenta con un protagonista digno de alabanzas: Judd Lauren, un Psi que vive rodeado de lobos pero permanece completamente aislado. La suya es la historia de un hombre oscuro y duro, que tiene que atravesar un largo camino en busca de sus emociones. Gracias a él, Caricias de hielo es lo que es: una novela que engancha al lector gracias a la combinación de amor, acción e intriga.

3 comentarios :

  1. Hola!
    Ains, no me leo la reseña que ya he leío un par de spolilersxD
    Estoy deseando probar esta saga^^
    Besotes!

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  2. Esta saga solo me he leido el primero y me gustó, tengo pendiente los demás, pero es que tengo una lista enorme de pendiente y no tengo tiempoooo!! jajaja Gracias por la reseña guapa :)

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  3. He leido los tres primeros y me han encantado, sin duda coincido contigo, el tercer libro es el que más me ha gustado de los tres. Judd me ha cautivado en todos los sentidos, además cada libro va a más, pasando en este útimo muchas más cosas que en los otros anteriores. Me encanta que aparezcan los protagonistas de los anteriores, así sabemos como les van, Lucas y sascha tambien me gustaron mucho.
    Me recuerda en como avanzan las tramas y en que cada libro se centra en una pareja en otra saga que me enganchó hace tiempo y por el que voy en el libro 10 que es La hermandad de la Daga Negra (increiblemente maravillosos).
    Asi que ahora a por el cuarto que trata de Clay (sin duda otro cambiante de lo más interesante)

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