Reseña: El juramento, Kimberly Derting

Título: El juramento 
Autora: Kimberly Derting

Editorial: La galera
Saga: El juramento

ISBN: 978-84-246-4087-3

Sinopsis:

En el mundo de Charlie, las clases sociales están muy diferenciadas y cada una habla su propio idioma. Ella ha nacido con el don de entender cualquier lengua, pero debe ocultar su poder. La guerra se acerca y las medidas de seguridad cada vez son más extremas. El grupo de rebeldes que quiere acabar con la vida de la reina está ganando terreno, y el futuro de su ciudad es incierto. En medio del caos, Charlie conoce a Max. Siente una atracción instantánea, pero se ve obligada a ignorar sus sentimientos. Charlie intentará proteger a su familia y huir del peligro, sin darse cuenta de que ella es una pieza clave en el desenlace de la guerra.

En esta historia distópica, nos encontraremos con una sociedad estamental, divida en clases (marginados, comerciantes, realeza…), controlada por el férreo puño de una reina marchita que ve como su reinado peligra ante el inminente descontento de una buena parte del pueblo: los rebeldes.

Charlaina pertenece a la clase de los comerciantes, acude a la escuela y trabaja en el restaurante de sus padres, a primera vista parece una chica normal pero no es así: Charlaina tiene el poder de entender y hablar todos los idiomas que escucha o lee, y esto, en su sociedad, está penado con la muerte. Cada clase tiene su propia lengua, aunque todos comparten el engliase, la lengua común que les permite comunicarse, pero está totalmente prohibido entender o hablar cualquier otra lengua, además, cuando a una clase le hablan en una lengua que no es la suya o el englaise debe agachar la mirada. Desde pequeña, sus padres han luchado porque el secreto de su hija siguiera siendo eso, un secreto, y lo han logrado a base de sacrificios, pues en caso de salir a la luz, cualquiera delataría a Charlaina y esta moriría en la horca.

Ante el peligro de una revolución, la ciudad está en estado de alerta, el ejército vigila la ciudad y hay que tener mucho cuidado con lo que se hace, cualquier actitud o actividad sospechosa te puede llevar a la muerte. La reina, envejecida y debilitada, debe darse prisa en encontrar una nueva heredera, tiene descendientes, todos ellos varones, pero ella necesita una mujer con sangre real y que tenga poderes. Sólo ella podrá ser la próxima reina de Ludania.

Una noche en la que Charlaina sale de fiesta con su amiga Brooklyn a un  club nocturno, uno que en poco tiempo desaparecerá ya que ninguno aguanta mucho tiempo abierto, escucha vez una lengua que nunca antes había escuchado, una lengua que hablan tres desconocidos, e inmediatamente se siente atraída por uno de ellos: Max.

Charlie —diminutivo de Charlaina — acepta la vida que le ha tocado vivir: ha nacido en la clase de los comerciantes, tiene la suerte de ir a la escuela  (donde sólo la preparan para realizar el oficio propio de su clase), y ayuda a sus padres en el restaurante que poseen. Tiene una vida humilde, sin ningún tipo de lujo, una hermana pequeña, Angelina, a la que quiere y cuida todo lo que puede, y un par de amigos, Aron y Brooklyn, que la alegran los días. Pero en ella hay también una parte que reconoce que la sociedad en la que vive no es justa, no hay derecho de que por haber nacido en una determinada casta estés obligada a tener el tipo de vida propio de esa casta, que no tengas posibilidades de mejorar, de ser libre. Además, el don que posee la hace más consciente de todas las injusticias que la rodean y eso la hace más difícil ocultar su vena revolucionaria. Hasta que conoció a Max, Charlie no se había preocupado por las cosas del corazón, pero desde el momento cero queda prendada de él, aunque también es recelosa, no le conoce, le teme e intuye que guarda secretos. Max también siente lo mismo por Charlie y la busca incansablemente. La relación entre ellos no me ha convencido nada, me ha parecido un poco de relleno; ese tipo de amor, a primera vista y sin ningún tipo de desarrollo, no me lo creo. Me creo la atracción y la curiosidad que sienten el uno por el otro pero no la relación de amor que tienen.

Max me ha decepcionado bastante, le he encontrado soso y sin mucho que aportar a la historia. Al principio, me esperaba grandes cosas de él, por todo le misterio que le rodea y la curiosidad y miedo que despierta en Charlie, pero a medida que la historia avanzaba su personaje se me antojaba flojo y de poco interés.

La historia cuanta con buenos secundarios. Por un lado está la hermana pequeña de Charlie, Angelina, una niña que no habla pero que entiende perfectamente todo lo que ocurre a su alrededor. Es preciosa la relación que tiene con su hermana y será un personaje que cobre mucho peso en la historia. También está Brooklyn, la mejor amiga de Charlie, una chica alocada, a la que le encanta ligar. Su evolución es muy interesante  y le aporta grandes cosas a la historia.

El Juramento está divido en dos partes con ritmos totalmente desiguales. La primera parte nos encuadra en la historia, nos presenta a los personajes y tiene sus buenas dosis de acción y misterio. En la segunda parte las cosas se descontrolan, todo pasa muy rápido y no hay un solo momento de tranquilidad. Las cosas suceden tan deprisa que la autora se salta cosas importantes y describe todo con demasiada brevedad. Esto es extensible al final, que ocurre de repente y te deja descolocado por la brevedad y simplicidad con las que todo se resuelve. Ambas partes coinciden en tener un estilo directo, ágil y sencillo.

No cabe duda de que la trama de la novela es interesante. Ahora que las distopías están tan de moda sentía una tremenda curiosidad por El juramento; Kimberly Derting ha logrado una trama original, con muchas posibilidades pero que ha reducido al mínimo. La relación entre Max y Charlie no aporta nada a la historia, es un romance que no se sostiene por ningún lado y que realmente, para mí gusto, sobraba, al menos, tal y como se ha planteado. Aún con todo, El Juramento es una historia entretenida, rápida —te la lees en un par de ratos— y que consigue despertar tu interés.