Reseña: Presa del placer

Presa del placer

Autora: Nalini Singh                   Género: R. Paranormal

Editorial: Plaza y Janés              Serie: 5º Psi/Cambiantes

La científica Ashaya Aleine, que vive separada de su hijo de cuatro años y enfrascada en la creación de implantes cerebrales que supondrían la efectiva esclavización de su raza, es la psi perfecta: fría, imperturbable, sin sentimientos... O eso aparenta aunque en realidad lucha desesperadamente por salvar a su hijo y huir con él de la PsiNet. Pero cuando surge la oportunidad de escapar, Ashaya se encuentra a la merced de un cambiante enemistado con su raza.

Dorian Christensen, francotirador del clan de los DarkRiver, siente un profundo odio por los psi desde que uno de ellos asesinó a su hermana y, aunque es incapaz de transformarse en su encarnación animal, sin duda tiene alma de leopardo. Y su rabia acumulada alimenta una sed de venganza arrolladora. Sin embargo, no solo es el encargado de proteger a la psi rebelde y su hijo, sino que al ver a Ashaya y detectar el aroma de exótica feminidad que emana, siente el irrefrenable deseo de hacerla suya.

Poco a poco la naturaleza felina de Dorian entrará en juego para intentar derribar las defensas de esa enigmática mujer. Y juntos comprenderán que el verdadero enemigo a veces puede ser alguien que llevamos dentro.

Nalini Singh se ha convertido en una de mis autoras de referencia, me ha ganado con dos de sus series: la de los Psi/Cambiantes y la de El gremio de los cazadores. Como pudisteis leer hace unas semanas, el cuarto libro de la serie de los Psi/Cambiantes, La luna delleopardo,a pesar de gustarme, me decepcionó en ciertos aspectos. Afortunadamente, en este quinto libro Nalini vuelve a ser la autora que tanto me gusta, vuelve a hacer despliegue de su fantasiosa imaginación y logra una historia con enganche y mucho mejor que la anterior.

De nuevo, Nalini opta por emparejar a una Psi con un cambiante del clan de los DarkRiver, pero logra hacer de esta relación algo espacial, diferente al resto de parejas.  Dorian siente un odio profundo por los Psi, uno de ellos asesinó brutalmente a su hermana y, por si fuera poco, son una continua amenaza para los suyos. Para él es insoportable sentirse tan atraído por una de ellos, concretamente por Ashaya, una científica de élite que trabaja para el Consejo Psi en el desarrollo del implante P, un avance que convertirá a todos los Psi en marionetas del Consejo. La relación entre Dorian y Ashaya no resulta sencilla, ambos arrastran un pasado que les ha provocado muchas heridas y los obstáculos que tienen que superar no son pocos. Su relación me ha parecido más madura y compleja que las anteriores, con un tiempo diferente. La ira, el odio, la rabia y los deseos de venganza de Dorian y la lucha interna, la capacidad de sacrificio y el amor por la familia de Ashaya marcarán su relación. Una relación compleja, llena de detalles y que se desarrolla con tiempo y prestando atención a cada una de las etapas por las que la pareja necesita pasar hasta que surja un verdadero vínculo entre ellos.

Me ha encantado Dorian como protagonista. Ese cambiante que conocimos en el primer libro, consumido por la rabia, un gato latente, sin la capacidad para adoptar su forma animal (elemento que tendrá su importancia en la trama) y con mucho carácter. Ha vivido demasiado tiempo amargado y la presencia de Ashaya, su compañera, despierta sentimientos en él que hasta ese momento no había conocido. Me gustan su carácter, su posesividad, su faceta juguetona, su devoción por el clan y su lado protector. No es tan juguetón como el resto de los gatos, pero tiene sus momentos distendidos y sabe como tentar a su pareja a pesar de su rigidez.

Ashaya es una protagonista a la altura de Dorian. Es mucho más fuerte de lo que podría suponerse, guarda multitud de secretos  y detrás de esa fachada de frío se esconde una mujer que ha tenido que sacrificar demasiado. Me han gustado sus luchas internas y los pasos que ha seguido para vivir su propia vida.

El libro continúa con el hilo conductor de la serie: comienza a fraguarse una rebelión en el mundo de los Psi para acabar con el Silencio, mientras que el Consejo Psi sigue urdiendo planes para imponer sus deseos, con la sorpresa de que en esta lucha entre cambiantes y Psi se incorporará una tercera raza, la más débil y a la que no se tenía en cuenta hasta su aparición. La trama es bastante compleja, Nalini ha creado un mundo ante el que me quito el sombrero (aunque haya veces que me tenga que releer algunos párrafos para entender lo que me cuenta).

De nuevo, Nalini nos deleita con la aparición de los protagonistas de los anteriores libros y de otros sobre los que espero leer no tardando demasiado: Lucas y Sascha, Faith y Vaught, Judd y Brenna y Tallin y Clay. No me puedo olvidar de Keenan, el pequeño hijo de Ashaya, que le aportará una pizca de ternura a la historia.

Presa del placer me ha dejado con muy buen sabor de boca. Aparece la Nalini que tanto me gusta, esa que combina a la perfección acción, amor y suspense, que da rienda suelta a su imaginación, que se toma su tiempo para construir personajes y situaciones. Esperemos que la espera no se haga demasiado larga y pronto podamos disfrutar de Marcada a fuego, sexto libro de la serie, protagonizado por Mercy, una centinela de los leopardos, y el teniente de los lobos, Riley Kincaid, y que por lo poco que he podido leer promete mucho.

Otros libros de la serie:

1º La noche del cazador

2º La noche del jaguar

3º Caricias de hielo

4º La luna del leopardo