Lo mejor del 2012

En 2012 he leído mucho, más de lo esperado, y aunque me he llevado algunas desilusiones, también me he topado con grandes historias. Lamentablemente, no todos los libros de los que hablo aquí están reseñados, no tengo tiempo suficiente para reseñar todo lo que leo. Intentaré ponerle remedio.

Mejores lecturas

El jinete de bronce, Paullina Simons

Si hay un libro que este año me ha tocado el alma ha sido, sin dudas, El jinete de bronce. Nunca podré transmitir todo lo que este libro ha provocado en mí, lo que me ha conmovido. Es uno de los mejores libros que he leído nunca, todo en él es perfecto, no se le puede criticar nada. Me ha hecho llorar, reír, vibrar, enfadarme... me ha llegado a las entrañas. No hay una semana en la que no le coja para leer alguno de mis pasajes preferidos. ¡LEEDLO!

Delicias y secretos en Manhatan, Olivia Ardey

Olivia Ardey ha sido uno de los grandes descubrimientos del año. Además de escribir muy bien y ponerle mucho mimo a sus novelas, teje unas historias de amor que conquistan. Tengo muchas ganas de leer su próxima novela: Bésame y vente conmigo.

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Tú eres mi amor, Judith McNaught

Que Judith McNaught es una de las grandes en romántica histórica es una realidad. Con esta historia me mantuvo en vela, pegada a sus páginas, sin querer parar de leer. Y me emocionó de verdad, algo difícil.

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Donde siempre es otoño, Ángeles Ibirika

Ángeles ocupa un lugar especial en mi estantería. No me hizo falta leer más que un libro suyo para saber que tiene algo especial. Con Donde siempre es otoño me sorprendió, arriesgó con un protagonista lleno de defectos que me robó el corazón.

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Niebla en el pasado, Ana R. Vivo

¿Quién decía que la novela romántica no podía tener una buena trama de suspense? Niebla en el pasado tiene lo que cualquier lectora de romántica desea: una preciosa historia de amor, una buena trama secundaria, unos protagonistas que llegan al lector y un contexto muy bien logrado.

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Magia comanche, Catherine Anderson

Catherine Anderson es otra de mis autoras románticas preferidas. Tiene una sensibilidad especial, crea historias de amor con mucha magia y ternura. Con Magia comanche pone el broche final a la saga Comanche, otra que debéis sumar a vuestra lista de pendientes.

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Tenías que ser tú, Susan Elizabeth Philips

Quien no haya leído algo de SEP que vaya ahora mismo a la librería más cercana y compre uno de sus libros ¡ya! Tenías que ser tú es la obra que más me gusta de la autora: divertida, fresca, emocionante, intensa... ¡un placer!

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Las ventajas de ser un marginado, Stephen Chbosky

Una novela juvenil diferente, especial, dura, tierna y sincera. Otra de las grandes sorpresas del año y un libro que recuerdo con mucho cariño.

La calle de los sueños, Luca Di Fulvio

Que la vida no es fácil y son muchos los obstáculos que tenemos que enfrentar, queda claro con esta novela. Me hizo llorar muchas veces, pero me atrapó de tal manera, que no me importó. No es novela romántica, pero habla de amor, de vida, de amistad, de fracasos, de encuentros y desencuentros.

Mención especial para:

• Los pecados de lord Cameron me aportó mucha tranquilidad. Su historia de amor es bonita y tierna, tiene algo muy especial.
• Cuando el corazón perdona, Ruth M. Lerga. La autora me sorprendió con esta obra, la primera que publica. Habla sobre ciertas situaciones que se dejan de lado en la novela romántica histórica y lo hace con cierta frescura.
• Entre sueños, Ángeles Ibirika. La historia más dulce de la autora, una novela intensa y real, en la que los sentimientos están a flor de piel.
• Night School, C. J. Daugherty. Una de las sorpresas del año en lo que a novela juvenil se refiere. Bien escrita, con sentido, y con buenos personajes.