Reseña: Acero y miel

Acero y miel

Autora: Ana R. Vivo
Editorial: Ediciones Kiwi
ISBN: 978-84-939403-8-6
Género: Contemporáneo

Sinopsis:

Karen Preston se ve obligada a viajar a Funchal, Madeira, para tratar de convencer al despiadado J. W. Bernades de que ella y su hermano, Robert, son buena gente. Sin embargo, nada más llegar a la isla, Karen sentirá que los problemas crecen en proporción a sus miedos y fobias. El susodicho no aparece, todo el mundo se pone en su contra y, por si fuera poco, conoce a un atractivo isleño que la seduce nada más aterrizar en la capital provocando que olvide a menudo el motivo de su visita, y haciéndola vivir situaciones de los más descabelladas en su, hasta ahora, ordenada y pulcra vida.

Poco a poco, Karen, se verá involucrada en la vida de los Bernades y su propio pasado le pasará cuenta, obligándola a tomar decisiones muy drásticas.

¿Conseguirá Karen su propósito? ¿O se verá envuelta sin remedio, en los líos que le depara esta increíble isla del atlántico?

La portada de Acero y miel ya nos adelanta lo que vamos a encontrar entre sus páginas: una historia desenfadada, fresca, sencilla y poco profunda.

La historia arranca cuando Karen tiene que viajar a Madeira para convencer a Joäo, el hermano de su futura cuñada, de que ella y su hermano son buena gente y uno unos aprovechados que quieren sacar partido de la situación económica de los Bernades. Debo reconocer que el motivo para el viaje de Karen me ha parecido un poco flojo, lo más normal es que fuera la propia Marina la que hubiera ido a enfrentarse a su hermano, quien no se fía de los hermanos Preston y desde el primer momento tomará a Karen por una cazafortunas, tratándola de una forma poco educada.

Además de la evidente antipatía que sienten los personajes, y que se llevará gran parte del protagonismo de la historia, también nos encontramos con otros elementos que complementan la historia: la historia de amor entre los hermanos de Karen y Joäo, el pasado de ambos protagonistas, y varios atentados y secretos que ponen en peligro su vida.

La relación entre Karen y Joäo es un constante tira y afloja, a pesar de la atracción que surge entre ellos, la antipatía sigue estando presente a lo largo de la historia. Ambos tienen personalidades fuertes, y aunque Karen es un verdadero encanto de mujer, Joäo la provocará de todas las formas posibles.

Joäo es uno de esos personajes que no cae demasiado bien; cortante, frío, arrogante y desconfiado, no muestra un ápice de sensibilidad y parece no tener debilidades. Pero todo esto no es más que una fachada y poco a poco iremos conociendo al hombre que es en realidad.

Karen es completamente opuesta a Joäo: divertida, positiva, agradable, simpática, sociable… Sabe sacar fuerzas de flaqueza, se ha comportado como una madre con su hermano y se repone de los golpes que la vida le da, levanta la cabeza y sonríe.

Los personajes secundarios flojean un poco, especialmente Marina (me esperaba algo más de garra por su parte), y lo mismo me pasa con Robert, el hermano de Karen, que debería haber defendió más a su hermana.

Me ha gustado mucho el escenario en el que se desarrolla la historia: Madeira. No solo porque es un escenario poco explorado en este género, sino porque además va en sintonía con la trama, exótico y con muchas opciones.

Acero y miel es una historia sencilla y entretenida que te hará pasar un buen rato, pero que no te dejará huella.