Reseña: Un millón de secretos inconfesables

Un millón de secretos inconfesables

Autora: C. L. Parker         Género: R. Erótico

Editorial: Sombras           Serie: 1º Dueto millonario

Delaine Talbot tiene un secreto. Cuando un asunto de vida o muerte amenaza con acabar con su familia, Delaine decide hacer un sacrificio muy especial. Se ofrece en puja en el club erótico más exclusivo de Chicago. Ahora, Delaine es propiedad de Noah Crawford, un acaudalado magnate que la introduce en un seductor festín para los sentidos, y despierta en ella deseos con los que ni siquiera se había atrevido a soñar. Noah ignora el motivo por el que Delaine se vendió por tanto dinero, pero para él es un negocio perfecto. Esa mujer bella e inexperimentada satisfará todas sus necesidades, pero jamás conseguirá siquiera rozar su corazón. Casi desde el principio la relación se vuelve más ardiente de lo que ambos habían supuesto. Cuando se pelean, no se dan cuartel. Cuando se aman, lo hacen sin piedad. Pero esta unión física tan intensa no tarda en dar un en convertirse en algo para lo que ninguno de los dos estaba preparado.

¿Os apetece leer algo divertido, fresco y caliente? ¿Un cuento de hadas moderno, con mucho sexo, un esquema ampliamente conocido y unos personajes sin pelos en la lengua? Entonces
Un millón de secretos inconfesables es vuestra lectura. Como ya os podréis imaginar, al menos si sois lectores realistas, no os vais a topar con una historia que rompa moldes o que sorprenda. Lo que la autora nos ofrece es un descanso de la realidad, una fantasía divertida y caliente, un cuento de hadas a pesar de los baches que se encuentran por el camino los protagonistas. Una lectura ligera, divertida y entretenida, sincera en tanto que no engaña al lector, que desde el primer momento sabe el tipo de historia que tiene entre manos. Y si en algo marca la diferencia la novela es en su tono, ligero y espontáneo, con salidas de tono por parte de los personajes y diálogos internos que oscilan entre los hilarante y vergonzoso y que te roban más de una sonrisa. No cabe duda que la autora tiene un sentido del humor muy peculiar y, además, sabe impregnarlo en la historia.

Delaine Talbot se encuentra en una situación límite: su madre está gravemente enferma, su padre se ha quedado sin empleo y no tienen recursos para pagar la carísima asistencia médica de su ser más querido. Por el amor que siente por su progenitora, Delaine toma una drástica, polémica y arriesgada decisión: venderse en un club. Así, en medio de puja clandestina, pasará a manos de Noah Crawford, con quien firmará un contrato por dos años, tiempo en el que deberá someterse a los impulsos sexuales de este, convivir con él y acompañarle a diferentes eventos sociales.

Con un argumento como este, podríamos encontrarnos con una historia dramática, dura y horrenda, pero no sucede nada de esto. Un millón de secretos inconfesables está pensado para que el lector disfrute leyéndolo, para que imagine –que no crea– que incluso de una situación espantosa se puede sacar algo bueno y ser afortunado. No nos engañemos, la situación de Delaine es espeluznante, tener que venderse por dinero no es algo grato. Pero la autora no o enfoca de esta manera, no le quiere dar ese tipo de profundidad, de ahí lo que menciono en líneas anteriores, el clásico cuento de hadas que constituye el fondo de la historia. Cambia el decorado, pero la esencia de la historia es la misma. De ahí que haya ciertas lagunas argumentales que, aunque son fácilmente detectables, no ensombrecen lo que la historia quiere transmitir.

La autora tiene un estilo sencillo, directo y espontáneo y opta por unos personajes realistas, imperfectos y simpáticos, que saben llegar al lector. Delaine carece de filtro mental, es temperamental y pasional, y no duda en picar a Noah para provocarle. En cuanto a Noah, es mucho más blandito y adorable de lo que nos quiere hacer creer. Lo ha pasado mal, desconfía de las mujeres y está harto de tener que mantener las formas, de ahí que opte por acudir a la puja del club y llevarse a Laine a su casa. La relación entre ellos empieza como algo meramente sexual, pero la sucesión de encuentros ardientes y la convivencia provocarán que lo suyo alcance otro nivel de profundidad, dando paso al cariño, los celos, la preocupación y, finalmente, el amor. Todo ello sin perder la chispa y el tono ligero y divertido de la historia, con pequeñas dosis de drama y muchos revolcones.

Un millón de secretos inconfesables es una lectura para desconectar. Uno de esos libros que no te dura entre las manos más que un par de horas, pero que logra hacértelo pasar bien gracias a una acertada combinación de humor y sexo, unos personajes realistas y una trama ligera.