Reseña: Follamigos

Follamigos

Autora:  Shirin Klaus       Género: R. Erótico

Tras un encuentro fugaz en una discoteca, un viejo amigo de Sara le propone que sean follamigos. Ella no está del todo convencida pero acepta la proposición. ¿Qué daño puede hacerle tener encuentros sexuales consentidos con un chico que no está pero que nada mal? Pero él parece tener una idea algo extraña de lo que hacen los follamigos y en una relación como esta siempre hay alguien que acaba enamorándose. ¿Será el caso de Roberto... o de Sara?

Follamigos es una novela corta, ligera y entretenida, que narra una historia que bien puede ser real y que te deja con un buen sabor de boca. Encuadrada dentro del famoso género romántico-erótico, esta novela se deja de traumas de infancia y de juegos de dominación y narra la historia de dos personas normales que a pesar de tener un pasado en común, inician una relación muy diferente al lazo que les unía.

Sara busca a alguien con quien mantener un encuentro sexual (la pobre parece un poco desesperada en la discoteca, buscando el mejor trozo de carne disponible) y se topa con Roberto, un viejo conocido que le propondrá que sean follamigos, una relación que consiste en mantener encuentros sin establecer vínculos afectivos más allá de los que hubiera antes de emprender este tipo de relación, que es justo lo que Sara, desencantada del amor, parece necesitar. La novela se basa en esta parte de la relación y deja de lado el pasado (que creo que podría habernos dado alguna que otra escena interesante).

Como es obvio, la novela está llena de escenas picantes, que pese a no ser nuevas están escritas con elegancia y claridad. La autora tiene un estilo sencillo y ágil y le da un buen ritmo a la historia, que te lees casi sin darte cuenta. Las novelas eróticas puras no me suelen gustar, me hacen falta sentimientos y romance, y por suerte, la novela los tiene (aunque en dosis justas).

A falta de amor, buenas eran las reacciones químicas de otro tipo.

En cuanto a los protagonistas, Roberto y Sara, tengo sentimientos encontrados. Ella no me ha gustado demasiado por ciertas actitudes que tiene, aunque también entiendo que la han hecho sufrir, que ha salido escarmentada y le cuesta confiar. Pero sigue sin convencerme esa actitud suya cuando va a la discoteca. Por el contrario, Roberto me ha gustado mucho. Es un chico normal y corriente, detallista, atento y muy simpático.

Las novelas cortas me suelen dejar a medias, con la sensación de que me he dejado muchas cosas por el camino, pero en este caso no ha sido así. Follamigos consta cincuenta páginas y creo que su extensión es la justa. Quizás se podrían haber añadido un par de capítulos más, pero la esencia de la historia queda retratada en ese medio centenar de hojas.

En resumen, Follamigos es una novela ligera que te lees en un suspiro y cuyo objetivo es entretener durante un breve lapso de tiempo. No deja huella (o al menos a mí no lo ha hecho) y no destaca por su originalidad, pero no tampoco te deja con malas sensaciones.