Reseña: Un hombre que promete

Título: Un hombre que promete

Autor: Adele Ashworth

Género: Histórico

Editorial: Random House Mondadori, Cisne
ISBN: 9 788483 467213

Sinopsis:

Romance, espionaje y contrabando de opio en la Inglaterra del siglo XIX. Hija de una actriz francesa y de un oficial de la marina inglesa al quien nunca conoció, Madeleine se convierte en una encendida patriota británica que trabaja durante años como espía en Francia. Cuando le asignan la tarea de descubrir quién está detrás del contrabando de opio en el sur de Inglaterra, Madeleine deberá trabajar junto a Thomas Blackwood, un tipo oscuro y torturado pero interesante. La atracción entre ambos es instantánea, pero los empujes del deseo podrían hacer peligrar la misión inicial…

Thomas está en un pequeño pueblo británico investigando el contrabando de opio y para resolver el caso necesita la ayuda de Madeleine. Así, esta francesa luchadora, fuerte e independiente conoce al hombre que va a suponer un antes y un después en su vida.

Un hombre que promete tiene un protagonista masculino que me ha enamorado. Thomas Blackwood es distinto al resto de hombres que nos solemos encontrar en las novelas ambientadas en esta época. Es un hombre pausado y reflexivo y casi diría que posee el don de la palabra, sabe decir las cosas en el momento correcto y con la intensidad necesaria.

Madeleine también es una mujer fuera de lo común, no sólo por su trabajo, espía de la corona británica siendo medio francesa y en una sociedad en la que la mujer no es más que un florero, sino porque no añora lo que gran parte de las mujeres de la época buscaban: casarse y tener hijos. Es una mujer independiente que no acepta la dominación de nadie, como mujer soltera y libre la va bien.

La atracción entre ellos surge desde el primer momento. Thomas tiene varias lesiones de guerra y la prueba más evidente de ellas es una notoria cojera. Por este motivo, a priori, Madeleine deduce que se reprime a los impulsos sexuales. Porque sí, Madeleine es una mujer que no le teme a su sexualidad, todo lo contrario, disfruta de ella.  Sorprende ver a una mujer que disfruta tan abiertamente de los placeres sexuales. Como en todo lo demás, en esta faceta Madeleine es muy franca y resuelta y responderá a las insinuaciones de Thomas.

Me han gustado mucho las conversaciones que sostienen, intercambios inteligentes repletos de connotaciones sexuales y dobles sentidos que calientan el ambiente y crean una atmósfera sensual agradable. La autora ha conseguido trasmitir todas estas sensaciones al lector, sientes el deseo de los personajes, como los sentimientos pugnan por salir pero ellos se resisten.

Es cierto que el argumento no es novedoso, es difícil dar con un argumento nuevo y original, pero la narrativa de la autora y lo profundos que son los personajes hacen que la historia reluzca. Desde el inicio engancha, la relación entre Madeleine y Thomas es intensa, repleta de matices y se intuye que nos falta una pieza para comprenderlo todo, algo que descubriremos y que le dará una nueva visión a la historia.

Los personajes secundarios apenas tienen peso en la trama, y el tema del contrabando aunque si se desarrolla queda relegado a un segundo lugar. Madeleine y Thomas eclipsan lo demás. Sus reflexiones, dudas, deseos, temores, debilidades… nos acercan a ellos y absorben toda nuestra atención.

Un hombre que promete es una historia bien escrita que tiene a una pareja de protagonistas a la altura, personajes con un pasado doloroso que encontrarán una pasión y un amor no conocido hasta el momento.