Simona Ahrnstedt · 3º- Solo tú · R. Contemporáneo · Plaza & Janés
Voy a empezar esta reseña resaltando ideas clave para entender mi valoración de
Solo una aventura. Cuando en 2016 Plaza & Janés publicó por primera vez una novela de Simona Ahrnstedt,
Solo esta noche, me llevé una grata sorpresa y decidí seguirle la pista y leer todo lo que publicara en español. ¿Por qué? Por su magnifico estilo, por el cuidado, el mimo y el tiempo que se aprecia en sus historias, por apostar por su propia cultura en detrimento de las archiconocidas localizaciones americanas (sí, la cultura propia es un valor añadido para mí), por la coherencia en sus tramas, por gran trabajo con sus personajes (incluidos los secundarios), por el trato que se da a temas de gran calado social y por el respeto y el realismo con el que plantea las relaciones románticas. Todo esto lo encontramos en su nueva novela,
Solo una aventura, y aunque no está a la altura de las anteriores publicaciones
(Solo esta noche y
Solo un secreto), me atrevo a recomendarosla porque, además de todo lo anterior, funciona y es entretenida. Desde luego,
Simona Ahrnstedt es una autora que merece la pena leer, por lo que espero que siga siendo traducida en España porque es una de las mejores autoras que he descubierto en los últimos años.
Ambra Vinter, reportera para uno de los periódicos más importantes de Suecia, recibe el encargo de realizar un reportaje en Kiruna, la ciudad más septentrional del país, sumida en la oscuridad total en esa época del año. A Ambra la idea no le entusiasma porque el lugar despierta en ella recuerdos dolorosos del pasado.
Todo cambia cuando conoce a Tom Lexington, un exsoldado de élite que, tras haber sobrevivido a un cautiverio, se ha refugiado en los bosques helados de Kiruna. La elección de ese sitio tiene que ver con la mujer a la que ama y a la que quiere recuperar. Pero el destino tiene otros planes, y el Círculo Polar no tardará en convertirse en el escenario de una atracción tan inesperada como irresistible.
El argumento de la historia me resultó atractivo desde el primer momento: un hombre con el corazón roto, una periodista dura, un entorno gélido y desolador... Estas ideas me hicieron deducir que no iba a toparme con una historia sencilla, rápida y ligera, más bien todo lo contrario. Simona Ahrnstedt nos regala una historia complicada y realista que despega con mucha calma, en la que se dedican muchas páginas a desnudar, y no literalmente, a los protagonistas, y a pintar un entorno tan mágico como glacial. El romance es una parte fundamental de la novela, pero se desarrolla de una manera pausada, se cuece a fuego lento, pasa por etapas de forma calmada. Tiene momentos picantes y excitantes, hay escenas emocionantes, pero, sobre todo, hay calma y realismo. La de Ambra y Tom no es una historia propia de un cuento de hadas, no vivirán en una eterna luna de miel, es más, alcanzar el equilibrio les llevará mucho, mucho tiempo. Por todo ello, Solo una aventura es para mí la historia de dos personas solitarias y demasiado golpeadas por la vida que deben curar sus heridas y que en el camino se tropiezan y, sin buscarlo, acaban encontrando en el otro un refugio.
En cierto momento de la novela, Tom compara a Ambra con un erizo y... ¡no podía estar más acertado! Ambra no es una protagonista habitual en el género, es dura y distante, o al menos es lo que proyectan sus primeras capas, pero cuando empezamos a escarbar un poco más, se aprecia en ella una sensibilidad dolorosa, un sentido de la justicia muy marcado y, sobre todo, una abrasadora soledad que el lector contempla con verdadera pena. Ambra está sola y en multitud de ocasiones somos conscientes de ello con una realidad descorazonadora (desde luego, a mí son las escenas que más me han conmovido). En Ambra he percibido verdad, lo mismo que en Tom. Los he sentido auténticos, humanamente imperfectos, creíbles.
Tom me ha parecido un personaje brillante, creíble desde la primera página y poco idealizado. Su carrera militar ha dejado en él una huella difícil de borrar: el sínndrome de estrés postraumático, que está muy bien trabajado, con un realismo crudo. Tom es un héroe que se aleja mucho de los típicos héroes americanos de novela romántica. Es valiente y se sabe desenvolver en situaciones de riego, pero es pragmático y no se presenta como un dios capaz de sortear cualquier obstáculo. Hay algo muy real en él y a pesar de sus errores, me ha encantado porque, para mí, son esos mismos errores que no me gustan los que le hacen más real.
Siguiendo con elementos que me han gustado, quiero destacar tres aspectos más. En primer lugar, la ausencia de relaciones y realidades idealizadas. Aquí hay personas reales, más o menos afortunadas, ricas o atractivas, pero que sufren y padecen golpes independientemente de lo afortunados y poderosos que sean. Por otro lado está la historia de amor entre secundarios, con menos brillo que en anteriores títulos, pero que me ha gustado y vuelve a demostrar que conmigo funciona eso de que los polos opuestos se atraen (en este caso una cantante pop que debe estar siempre perfecta y que expone constantemente su vida a través de las redes sociales y un militar culto, cínico y atractivo). Y, por último y como es habitual en sus novelas, Simona Ahrnstedt aborda temas interesantes como lo hecho en Irak por los militares, la situación actual de la prensa, (en la que lo importante son los titulares sensacionalistas que dan clics), la exposición de las redes sociales y cómo algunos cobardes las usan para atacar y dar rienda suelta a sus putrefactas ideas, y la igualdad entre hombres y mujeres.
Entonces, si hay tantas cosas positivas en esta novela, ¿por qué no me ha gustado tanto las anteriores? Creo que le falta garra en ciertos momentos, me hubiera gustado más intensidad en ciertas partes y que se hubieran condensado las primeras doscientas páginas sin perder todo el ambiente creado (lo que no sé si es posible). La historia no me ha emocionado tanto como esperaba, quizá precisamente porque conozco a la autora y sé lo que es capaz de crear. Con esto no quiero decir que no sea una lectura interesante y entretenida, lo es de principio a fin, solo que no he encontrado en ella la intensidad y la fuerza de las anteriores.
En cualquier caso, Simona Ahrnstedt es una autora que tenéis que leer sí o sí, sobre todo si tenemos en cuenta la clase de publicaciones románticas actuales. Solo una aventura es una historia seria, coherente, realista, bien tratada, con personajes muy bien construidos, con una ambientación interesante y rica y con un romance, aderezado con una trama periodística atractiva, que huye de las idealizaciones propias del género y nos ofrece un final feliz envuelto en circunstancias complicadas. Además, si os preocupa que sea el tercer libro de una serie, sabed que se puede leer de forma independiente sin problemas.